Bootic cumple una década, y lo celebramos renovando los planes

Ya, está. Listo. Check. Done. Push. Boom. Nuestros nuevos planes están arriba!

Después de largas discusiones, harta planilla de cálculo, varias conversas con nuestros clientes e interminables pimponeos por email, hemos terminado de definir, pulir y subir nuestra nueva matriz de planes


Si tienes buen ojo o buena memoria, verás que bajamos los precios y agrandamos los límites de cada plan. Pero hay algo detrás de este cambio que es mucho más profundo e importante y que tiene su origen hace mucho, mucho tiempo, en una galaxia lejana, bien lejana.

Me explico.

Por allá en el año 2007, hace exactamente una década, como parte de un proyecto de Aardvark Labs escribimos el sabio Ismael y el chascón de mi persona la primera línea de código de una plataforma para gestionar catálogos de productos.

En ése entonces se llamaba Inventario, a pesar de que poco o nada tenía que ver con stock o inventarios. Y cómo no, le hicimos un sitio web absolutamente web dos punto cero, como lo muestra este pantallazo que rescatamos de la enciclopedia Encarta:

Inventario_-_El_catálogo_de_productos_que_todos_estábamos_esperando_1236308423636.png

Era una especie de proyecto interno, pero que luego decidimos convertir en un servicio para poder ofrecer a otros clientes, y así fue como a principios del 2009 lo anunciamos a público, bajo el nombre de Bootic.

Lo promovíamos como "el gestor de catálogos de productos que todos estábamos esperando", porque de eso se trataba. En ése entonces, el software no permitía que los usuarios metieran productos a un carro de compras. Ni siquiera un carrito. Por eso, las tres opciones de plan que habían se diferenciaban básicamente por la cantidad de productos que aguantaba cada uno.

En la medida en que fuimos creciendo, ampliando el número de funcionalidades de la plataforma, pero en vez de dedicarle tiempo a escribir código para que un cierto plan no tuviera una funcionalidad, simplemente se la dábamos a todos los planes. Corta.

Y así pasó el tiempo, y eventualmente agregamos el pago en línea, costos de envío, y fuimos incorporando un sinnúmero de funcionalidades que hicieron del bicho ése algo muy distinto a la versión ésa del principio de los tiempos.

Pero los planes siguieron prácticamente inalterados.

Mientras éramos chicos esto no significó gran cosa, pero en la medida en que se fueron sumando más y más tiendas, esto se terminó transformando en un punto bien crítico, ya que a medida que a nuestras tiendas les fuera bien, para nosotros eso implicaba, muchas veces, lo contrario.

La razón es muy simple y es porque bajo ése modelo, si una tienda vendía 10 o 1000 no había ninguna real motivación para cambiarse de plan, pero por el otro lado, si está vendiendo más significa que probablemente tiene más tráfico y por lo tanto nuestros servidores tienen que aguantar más carga, y probablemente necesitan más ayuda de parte nuestra (soporte, mejoras, plantilla, etc).

O sea perfectamente podría haber una tienda que vende 1000 con un catálogo chico (y por ello en el plan más barato), mientras que otra con menos ventas pero con un catálogo más grande, y por lo tanto obligada a estar en un plan más caro. El mundo al revés!

el-misterio-de-las-tiendas-en-linea.png

A partir de hoy, sin embargo, nuestra matriz de planes se hace cargo de esto y además de bajar los precios y aumentar la capacidad para los catálogos, define un número máximo de pedidos exitosos (confirmados o despachados) al mes, para cada plan. Ésta métrica nos permitirá dimensionar el tamaño de las tiendas a partir de ahora, y permite dar cuenta mucho mejor del costo que nos significa cada cliente, en términos de infraestructura, servicio, soporte, etcétera.

Es decir, cada plan "incluye" un número definido de pedidos exitosos al mes, según el cual cada tienda debiera estar según su rango normal de tráfico/movimiento. En caso de que algún mes ese número sea mayor, cobramos un monto por cada pedido por sobre el límite (1 USD por pedido).

Por ejemplo, si una tienda está en el plan que cuesta $69 dólares al mes y que incluye 100 pedidos, y un mes los pedidos exitosos fueron 120, entonces para ese mes específico el fee subiría en 20 dólares, es decir, $89 USD. En cambio, para un mes con 80 o 90 pedidos el fee sería el normal.

(Dato importante: sólo se consideran exitosos los pedidos sobre los $5.000 CLP).

La gracia de este modelo, además es que sin estar basado en una comisión (que es una palabra prohibida en Bootic), se hace cargo de campañas específicas o eventos como el Cyber Monday, donde se generan peaks de ventas que no necesariamente justifican cambiarse a otro plan para siempre. Y por el otro lado es un incentivo para nosotros para ayudar a nuestros clientes a vender la mayor cantidad posible, tanto para eventos específicos como en el largo plazo. 

Obviamente, siempre habrá un plan más grande así que siempre está la opción de cambiarse si es que eso sale más a cuenta, y de hecho Bootic automáticamente hará el cálculo y lo recomendará en caso de que sea así.

Como Bootic queremos crecer y profesionalizar nuestro servicio, y este es un paso súper importante en esa dirección. A primera vista el cambio de planes parece inocuo, pero detrás hay algo mucho más importante y es el giro de nuestro modelo: es que alinea nuestro crecimiento con el de nuestros clientes.

Feliz cumpledécadas Bootic!

Publicado el 10/11/2017 por Tomás Pollak

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